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ALMACENAMIENTO DE ALIMENTOS QUE DURAN 30 AÑOS EN CASO DE CRISIS ALIMENTARIA MUNDIAL

  La ONU alerta de una crisis alimentaria por el bloqueo en Ucrania   El riesgo es que ante la escasez de trigo y de fertilizantes a causa de la guerra, sumada a los efectos del cambio climático y tras dos años de pandemia, decenas de millones de personas alrededor del mundo sean arrastradas a la inseguridad alimentaria. La ONU advierte que si no se hace nada, la crisis global podría durar varios años.   Para las necesidades a largo plazo, donde se permita hacerlo, adquiera gradualmente una provisión de alimentos que dure mucho tiempo y que pueda usar para la supervivencia, tales como trigo, arroz blanco y frijoles. Estos alimentos pueden durar 30 años o más si se envasan adecuadamente y se almacenan en un lugar fresco y seco. Se puede rotar una porción de estos artículos en el almacenamiento de tres meses.   Alimentos que duran 30 años o más almacenamiento de alimentos Envasados correctamente, los alimentos bajos en humedad almacenados a temperatura ambiente o más baja (24°C /75°F o m

Una banana al día puede reducir el riesgo de padecer accidentes vasculares



Las personas con una dieta baja en potasio tienen 1,5 más posibilidades de padecer un accidente cerebrovascular o ictus.

Con 4 gramos de potasio al día, la cantidad equivalente al consumo de un plátano diario, se pueden reducir las posibilidades de sufrir un infarto cerebral, aún cuando los niveles de tensión arterial no varíen.


Eso es lo que se extrae de las conclusiones de un estudio del Instituto de Neurociencia del 'Quen’s Medical Center' de Honolulu, en Hawai y que publica hoy la revista 'Neurology' . Estos resultados se obtuvieron tras estudiar a 5.600 personas mayores de 65 años sin problemas de ictus. Entres quienes consumían bajos niveles de potasio, es decir, unos 2,4 gramos diarios, el riesgo de padecer una crisis coronaria era 1,5 veces mayor que entre los pacientes que tomaban más de 4 gramos.


Diuréticos y riesgo de crisisLa investigación también tuvo en cuenta el consumo de diuréticos entre los participantes en el estudio. Estos fármacos se emplean para prevenir el riesgo de ictus mediante el control de la tensión arterial. Lo que ocurre es que también suelen reducir los niveles de potasio en el organismo mediante la expulsión de líquidos.


Los resultados indicaron que los diuréticos pueden estar asociados a un riesgo 2,5 veces mayor de infarto cerebral. Además, el mayor riesgo de crisis lo presentaban los pacientes que, además de tomar diuréticos, presentaban fibrilación auricular.La doctora Deborah Green, principal autora del ensayo, insiste en que esto no implica que los diuréticos aumenten el riesgo de ictus, y se pregunta «si serían aún más efectivos si se acompañasen del adecuado consumo de potasio». Esta cuestión cobra una especial importancia en aquellos pacientes con otros riesgos añadidos, como la diabetes, el consumo cigarrillos o la fibrilación auricular.


El doctor Steven Levine, de la Universidad neoyorquina Mount Sinai, incide en el hecho de que el aumento de uno de estos factores de riesgo puede provocar que cualquiera de los otros sea aún más grave. «Pese a este potencial efecto adverso, las evidencias demuestran que bajos niveles de diuréticos pueden ser muy efectivos en la reducción del riesgo de crisis cardiovasculares».


Más factores y nuevos estudiosAunque los autores de la investigación reconocen que son necesarios nuevos estudios que confirmen estas cifras, recuerdan que la relación del potasio con los problemas cerebro-vasculares ya se había puesto de manifiesto con anterioridad. El potasio juega un importante papel en la regulación del tono vascular y otras funciones de los vasos sanguíneos, por lo que su importancia radica en la prevención de enfermedades cerebro-vasculares.


El doctor Levine, en un editorial que acompaña al estudio, apunta los flancos débiles de estos resultados. A su juicio, no se tuvo en cuenta que los efectos del consumo de potasio pueden ser diferentes en función de la raza, el sexo, o incluso de los niveles de presión sanguínea, el uso de diuréticos o la presencia de enfermedades renales.


Además, considera que los beneficios demostrados no pueden adscribirse exclusivamente al consumo de potasio, sino que minerales como el calcio y el magnesio juegan también un importante papel en la reducción del riesgo de enfermedad cardiovascular.




Fuente: El Mundo Salud




¡ DIOS LES BENDIGA !



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